Vía: www.eldia.es
Aunque alrededor del 40% del territorio de las Islas se encuentra protegido, "la mayoría de esta protección no es efectiva", denunció ayer Aurelio Martín, profesor del departamento de Biología Animal de la Universidad de La Laguna durante su intervención en el curso "Biodiversidad y turismo" de la Universidad de Verano de Adeje.
"Como todas las cosas, el turismo puede ser bueno o malo. Si se lleva bien puede dar algo bueno, pero en exceso es malo. Lo cierto es que Canarias está destrozada por el turismo, y eso no puede ser sostenible", dijo Martín, quien, en este sentido, abogó por potenciar "un turismo que da dinero, y más que el tradicional: el de gente que viene y paga grandes cantidades por observar nuestras especies autóctonas".
El docente universitario se refirió en su ponencia al nivel de conservación de los vertebrados terrestres endémicos del Archipiélago y a las amenazas que se ciernen sobre estos animales, especialmente graves en zonas como las insulares, que son más frágiles en este aspecto. En este sentido, Aurelio Martín recordó que en Canarias los endemismos suponen un 40% de la fauna y un 30% de la flora.
Entre las amenazas para estos animales, el conferenciante incluyó el nuevo catálogo de especies protegidas, aprobado recientemente por el Parlamento a propuesta de CC. Este texto, advirtió, rebaja (de "en peligro de extinción" a "vulnerable") el nivel de protección de especies como el lagarto gigante.
Otras amenazas son, detalló, la caza ilegal, los tendidos eléctricos, el aumento de la iluminación y, sobre todo, la acción de otras especies invasoras. Entre ellas llamó la atención sobre ratas, ratones caseros, erizos y, especialmente, gatos, que son "los peores", aseguró Martín. En este punto, recomendó a los propietarios de estos animales "cambiar mucho" su actitud y abogó por implantar medidas similares a las de algunos estados de Australia, donde los dueños deben responsabilizarse de los daños que cometan y retenerlos en sus casas durante la noche.
En el caso concreto del lagarto gigante de Tenerife, el biólogo recordó que antes "estaban por todos lados", mientras que ahora se encuentran sólo en dos puntos: Teno (entre 200 y 300 ejemplares) y Guaza (900).
