lunes, 24 de mayo de 2010

Alberto Brito critica que para materializar la construcción urgente del puerto de Granadilla el gobierno de Canarias atente contra toda la naturaleza de Canarias


El biólogo advierte que todo parece indicar que el Ministerio va a recurrir la Ley ayer aprobada porque en definitiva al quitar el gobierno muchos organismos en peligro de los catálogos lo que hace es ponerlos en peligro en todo el archipiélago


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 Alberto Brito, catedrático de Biología Marina de la ULL, analizó en el programa La Trapera de Radio San Borondón las consecuencias de la aprobación por parte de los grupos que sustentan al Gobierno canario del nuevo catálogo de especies protegidas de las islas y señala que la comunidad científica de las islas no se ha tomado nada bien este atentado contra la biodiversidad de Canarias, ya que recuerda que en su mayoría se trata de gente que lleva más de tres décadas trabajando en la naturaleza y muchas de las especies que están en ese catálogo han sido descubiertas y descritas por estos investigadores, por tanto los verdaderos conocedores de su problemática y no los políticos que poco o nada conocen de las especies.
Alberto Brito dijo que este miércoles fue un día negro para la biodiversidad y la conservación de las  especies de Canarias y añade que más allá de esta importante consideración inicial, la forma en que se aprobó el catálogo demuestra la concepción de la política que tienen nuestros dirigentes, que en general, tienen muy escasa sensibilidad con el medio ambiente y la naturaleza.

Nadie, salvo los dirigentes de CC y PP, puede entender que en el año internacional de la biodiversidad, el gobierno de Canarias haga un catálogo de estas características, un catálogo muy mal hecho, en el que de repente se ha creado una figura nueva denominada de interés para los ecosistemas canarios que realmente nada tiene que ver con la protección, un cajón sin fondo en el que han intentado meter a todas las especies que les crean problemas para poner en marcha sus grandes obras, en el sentido de que son especies importantes, a las que hay que conservar porque están en peligro, pero que en sí mismas constituyen trabas para realizar esas infraestructuras y obras de diversa índole.

El biólogo advierte que todo parece que el Ministerio va a recurrir la Ley ayer aprobada, pero al margen de esta posibilidad, señala que la comunidad científica de las islas no se ha tomado nada bien este atentado contra la biodiversidad de Canarias, ya que recuerda que en su mayoría se trata de gente que lleva más de tres décadas trabajando en la naturaleza y muchas de las especies que están en ese catálogo han sido descubiertas y descritas por estos investigadores, por tanto los verdaderos conocedores de su problemática y no los políticos que poco o nada conocen de las especies.

Brito, profundamente decepcionado, dijo que resulta increíble ver cómo organismos que personalmente conoce muy bien, que realmente están en peligro, quedan sin protección por el capricho de unos políticos sin más sensibilidad que para las infraestructuras, como increíble resulta ver cómo bajan de categoría a especies que hasta ahora gozaban de una protección considerable como el lagarto gigante de El Hierro y que provocó incluso el enfado de los políticos herreños, ya que de estar en peligro de extinción pasa a ser vulnerable cuando realmente se trata de un animal que está en peligro de extinción.

Por otro lado, los zifios y cetáceos marinos que tienen una población residente pequeñita en aguas herreñas, que son animales que sufren daños tremendos cuando hay maniobras militares o vertidos de contaminación, en el primer catálogo que propusieron eran incluidos, pero posteriormente los quitaron, porque estos políticos no valoran realmente la naturaleza que tenemos en Canarias, un patrimonio natural tan particular que nos ha convertido en punto caliente a nivel internacional.

Desde su punto de vista, para justificar la construcción urgente del puerto de Granadilla se han metido en el berenjenal de atentar contra toda la naturaleza de Canarias, porque en definitiva al quitar muchos organismos en peligro de los catálogos lo que hace es ponerlos en peligro en todo el archipiélago.